El 21 de Octubre de 1992, en Nueva Orleans, Louisiana, EEUU, moría un hombre que buscó solitariamente justicia enfrentando a la CIA y al gobierno de los EEUU para llegar a la verdad en el asesinato del presidente John F. Kennedy, ese día fallecía el fiscal Jim Garrison.  

Nacido el 20 de Noviembre de 1921 en Knoxville, Iowa, con el nombre de Earling Carothers Garrison, luego de la segunda guerra Mundial en la que se desempeñó como piloto, completó sus estudios de leyes e ingresó en la CIA. Al no colmar sus expectativas, abandonó la agencia de inteligencia para desempeñarse como fiscal de distrito el Nueva Orleans.  

Luego del asesinato de John F. Kennedy en Dallas y el posterior asesinato del único involucrado, Lee Harvey Oswald, el gobierno formó una comisión que elaboró un informe sobre el caso, determinando la responsabilidad absoluta de Oswald en el homicidio.

Luego de tantas investigaciones buscando y descrtando testigos, Un militar retirado le hizo una observación que encendió sus alarmas, le dijo -«¿quién se benefició con la muerte de Kennedy? y ¿Quién tiene el poder para hacerlo?». Garrison descubrió que Kennedy tenía planeado retirar tropas de Vietnam y por consiguiente interrumpir el pedido de helicópteros «Bell», empresa de la cual su vicepresidente Lyndon Johnson era accionista.      

Garrison llevó a juicio a Clay Shaw, alias Clay Bertrand un ex agente de la CIA que mantuvo reuniones con anticastristas, comunistas y agentes de la CIA en una oficina contigua a la de Oswald. En el juicio destrozó el argumento de la bala milagrosa que hacía un recorrido increíble dentro de la limusina y demostró las fallas intencionales de seguridad en el operativo.

Logró utilizar como prueba la secreta película filmada por Abraham Zapruder donde se ve claramente que el disparo final no provenía del depósito donde se encontraba Oswald, además de probar que era imposible que de un solo rifle salieran los disparos en tan corto tiempo. A pesar de ello el juicio fracasó por influencias en el jurado y perdió la batalla. La película de Oliver Stone «JFK» reivindica su trabajo, falleció poco tiempo después, el 21 de Octubre de 1992, en su lápida dice «Que se haga justicia aunque se desplomen los cielos.»  

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Por Vicente Florian

Periodista egresado de la UASD, Maestrando en Tecnologías de la Información y Comunicación para Docentes (TIC), Historiador e Investigador.

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