Desde el año 1964, se ha venido conmemorando el Día Escolar de la Paz y la No Violencia (DENYP), cada 30 de enero. Se eligió esta fecha en particular debido a que fue la fecha en que mataron a Mahatma Gandhi, líder nacionalista y espiritual de la India. Y la principal figura de la resistencia pacífica en el mundo.
Celebración escolar de la Paz y la No Violencia
En 1998 la ONU proclamó el Decenio Internacional para una Cultura de la Paz (2001-2010). En ese momento, el Día Escolar de la Paz y la No Violencia llevaba ya 36 años practicándose en centros escolares de todo el mundo.
Hay un himno para este día, que se llama Hermanos de las estrellas, con letra de Llorenç Vidal y música de Andreu Bennàssar. Existe una versión catalana-balear, una en euskera, una en interlingua (Brasil) y una en galaico-portugués.
Para Gandhi, la paz no era solo una postura acomodaticia para evitar conflictos. Para él, la paz era el único camino que debían recorrer los seres humanos, para seguir evitando tanto daño, tanto mal y tanta injusticia en el mundo.
Por esta razón en 1964 el profesor, poeta y pacifista mallorquín, Llorenç Vidal, decidió llevar a las aulas el pensamiento de Gandhi y desde entonces se celebra este día.
¿Por qué es tan necesario un Día Escolar de la Paz y la No Violencia?
Actualmente son muchos los conflictos que se están suscitando en el mundo, pero también es mucho mayor la cantidad de información que se consigue al respecto. Los niños y jóvenes, están siendo bombardeados constantemente con textos, datos, infografías, entre otros, que los exponen, queramos o no, a una realidad cada vez más violenta. Por si fuera poco, comportamientos como el bullying en las escuelas, el ciberacoso y el escarnio digital, están generando personas inseguras, con muy baja autoestima y en casos extremos, niños que recurren al suicidio por no tener las herramientas psicoafectivas adecuadas para afrontar esas situaciones.
El día de la paz lo que busca es sembrar valores en el alumnado, con el objetivo de crear hombres y mujeres que prefieran hablar en vez de golpear, conciliar en vez de gritar y unirse en vez de competir fieramente unos contra otros. Esto es lo que se conoce como cultura de paz.